La amputación de la Autoridad Padre y sus consecuencias – Dominique Rudaz

© Simon Vansteenwinckel – https://www.simonvansteenwinckel.com/

En su obra de 1942, La noción de la autoridad, Alexandre Kojève se hace eco a nivel político de lo que Lacan ya había subrayado en su texto de 1938 « Los complejos familiares en la formación del individuo »[1] relativo a la decadencia del padre : « La Autoridad política, amputada de su miembro ‟Padre”, se vuelve, pues, necesariamente, en la medida en que sigue siendo política, ante todo una Autoridad de Jefe »[2].

¿ Qué es la Autoridad para A. Kojève ? Es ante todo una relación entre un agente y un paciente : el primero actúa sobre el segundo. Pero este acto tiene la particularidad de no encontrar ninguna oposición por parte de quien es dirigido : el paciente, aun teniendo la posibilidad de oponerse, renuncia a la realización de esta posibilidad. ¿ Por qué ? Porque reconoce la autoridad del agente, y es por esta razón que para A. Kojève la autoridad y el reconocimiento de la autoridad son uno : no hay autoridad del agente si no hay reconocimiento de su autoridad por parte del paciente. Por consiguiente, el uso de la fuerza es incompatible con la noción de autoridad. Si el agente debe utilizarla para que el paciente obedezca, ha perdido su autoridad. Lo mismo ocurre con cualquier forma de compromiso, explicación o justificación. El prototipo es la autoridad del Padre sobre el Hijo, pero también tenemos variantes, como la autoridad del viejo sobre el jóven, la autoridad del muerto (testamento) sobre el vivo, o incluso la autoridad de Dios sobre el hombre. Este tipo de autoridad procede de la teoría escolástica o teológica.

Para A. Kojève « la Autoridad Padre » está ligada a la tradición : el pasado que determina el presente, la causa que engendra el efecto.

El tipo de Autoridad del Jefe surge de la teoría de Aristóteles : es la autoridad del que puede prever, del que tiene un proyecto, frente al que vive en lo inmediato. El prototipo es la Autoridad del Jefe sobre su banda, con las variantes : el director sobre el empleado, el maestro sobre el alumno, el sabio sobre el técnico[3].

Me parece que hoy – en los países occidentales – la forma preponderante de autoridad política es la del Jefe, descrita por A. Kojève. Es la era de los tecnócratas, de los sabios estadísticos y de los metaanálisis del INSERM[4] que llegan a predecir la eficacia de las terapias. Esto es autoridad, al menos a nivel estatal. « Está científicamente demostrado, es objetivo », dirá el público en general, reconociendo – e incluso haciendo existir – la autoridad del científico, del Jefe.

La Autoridad del Jefe ha sustituido a la del Padre. Usando las letras que nos son familiares, se podría decir que la insignia del Padre, de la tradición – le S1 – ha sido substituida por el saber del Jefe tecnócrata – le S2 : ahora es él quien ocupa el lugar del agente. El otro, el paciente – para utilizar el término de A. Kojève – también ha cambiado. Si el Padre tenía autoridad sobre el Hijo, incluso sobre el esclavo en el seno de la familia, ahora el Jefe ejerce la suya sobre otro tipo de paciente : gestiona las masas humanas (pensemos especialmente en las políticas migratorias).

A. Kojève señala otra consecuencia de la amputación del Padre bajo el régimen del Jefe : « la Autoridad política se descompone o se desagrega (se ‟divide”) precisamente a causa de esta amputación»[5] : división de los poderes políticos, el estado se vuelve inestable, es la revolución permanente. Esto no es ajeno – para nosotros psicoanalistas – a la pluralización de los Nombres-del-Padre tras su « evaporación [que] produce un sinnúmero de significantes identitarios que forman comunidades y tratan de imponerse a todas las demás »[6].

Ya sea la Autoridad del Padre o la del Jefe, es evidente que ambas participan de un discurso de dominación. Sin embargo, queda una pregunta : ¿ existe hoy algún tipo de autoridad que no sea de dominación ?

Referencias del autor :
[1] Cf. Lacan J., « Los complejos familiares en la formación del individuo », Otros escritos, Buenos Aires, Paidós. 2012, p. 33-96.
[2] Kojève A., La Noción de la Autoridad, Buenos Aires, Nueva Visión, 2006, p. 86.
[3] Incluso hay dos tipos de autoridad para A. Kojève : la del Juez (teoría platónica) y la del Amo (Hegel). Lamentablemente, no tendré ocasión de desarrollarlas aquí, pero les invito encarecidamente a remitirse al libro de A. Kojève.
[4] Instituto nacional de la salud et de la investigación medical, es un establecimiento público de carácter científico y tecnológico francés especializado en la investigación medical.
[5] Kojève A., op. cit., p. 85.
[6] Cf. Poblome G., Clínica y crítica del patriarcado, Argumento del congreso Pipol 11, disponible en internet.

Traducción : Fernando Gabriel Centeno
Relectura : Patricio Moreno Parra

Fotografía : © Simon Vansteenwinckel